Un homenaje a nuestros héroes cotidianos del Colegio Yale
El Colegio Yale se unió para celebrar a los dedicados empleados que son el corazón de nuestra institución. Con Un almuerzo especial quizimos expresar nuestra gratitud a nuestro personal obrero que incansablemente mantienen la seguridad de nuestro campus, aseguran que nuestras instalaciones funcionen sin problemas y crean un ambiente limpio y acogedor para nuestros estudiantes.
Desde primeras horas de la mañana hasta el anochecer, estos trabajadores esenciales demuestran un compromiso inquebrantable con la excelencia. Su arduo trabajo a menudo pasa desapercibido, pero su impacto es innegable. Son la columna vertebral de nuestra comunidad, la fuerza silenciosa que nos permite a todos prosperar.

Sin su dedicación, sería imposible mantener la infraestructura que hace del Colegio Yale un lugar de aprendizaje e innovación. Este homenaje es una pequeña muestra de nuestra inmensa gratitud.
El almuerzo fue un momento de risas compartidas, historias sentidas y reconocimiento sincero. Fue un recordatorio de que nuestro Colegio no es solo un lugar de estudio, sino una comunidad construida sobre el respeto mutuo y la apreciación.
En este Día del Trabajador, y todos los días, el Colegio Yale honra a estos héroes cotidianos.